lunes, 23 de febrero de 2004

Crítica a los romanófilos empedernidos

Ved qué piensan ciertos individuos de los romanófilos empedernidos:

"Definitivamente he desarrollado un prejuicio contra los admiradores/veneradores de Roma. Me refiero a esos que gustan de exaltar las "virtudes romanas", el "genio romano", el "noble espíritu romano", las "invencibles legiones de César", etc. etc. etc.

¿Por qué? Pues porque como buenos fanáticos (porque algo sí que lo son), no aceptan fácilmente las hipótesis que ponen en cuestión esa Roma idealizada, ni a los romanos ni a lo romano.

En el caso de la "caída" de Roma, me parece observar una correlación entre esa admiración/veneración y la preferencia por hipótesis psicológicas en vez de materiales, especialmente las que se refieren a la presión externa.

¿Por qué? Muy sencillo: Según la visión de esta gente, Roma, la gran Roma, la divina Roma, no puede sucumbir por cuestiones insignificantes como la inflación, la baja productividad agrícola o la presión de unos vulgares bárbaros.

De hecho, Roma no puede caer, lo que cae es "pseudoRoma", o sea, la Roma ya "degenerada". Por eso se prefieren factores de tipo degenerativo, y mucho mejor si los causantes de esa degeneración no vienen de dentro sino de fuera, como la "barbarización" o el cristianismo. No hay que explicar el mecanismo mediante el cual eso transforma Roma en pseudoRoma, porque para ellos es evidente, y para nosotros circular, es decir, no cae Roma sino pseudoRoma, ya que esos factores transforman Roma en pseudoRoma, ¿Y cómo lo sé? Pues porque NO PUEDE CAER ROMA sino pseudoRoma.

Esto es como la existencia de Dios para los creyentes: Asumo que Dios existe y me busco algo para apoyar su existencia. El cómo lo apoya no se examina con rigor lógico o empírico sino que está en la misma proposición que quiero probar, a saber, que Dios existe.

Por tanto, con esta gente es inútil hablar de economía o presión externa, porque tendrían que asumir que la Roma que cayó en el siglo V era como la que había en el siglo I o II (igual en cuanto a "grandeza" o "espíritu"). Y lo peor es que, a la que te descuides, te verás atrapado en su propio terreno, es decir, discutiendo sobre si el "genio romano" había decaído o no.

Es lo penoso de hablar con historiadores "humanistas", que no les interesa explicar los fenómenos sino exaltar aquello que admiran (Roma republicana y altoimperial) y denostar lo que desprecian (Roma bajoimperial, la barbarizada y degenerada). Y esto no va sólo contra los de la lista sino en general, incluyendo los observadores y cronistas de la época.

En definitiva que, en general, si Fulano admira X, difícilmente admitirá que X pueda ser vencida por Y, donde Y es algo menos admirado. Necesariamente ese X se habrá transformado en un X' bastante menos admirable. Por tanto, la confianza que me suscitan esos Fulanos a la hora de analizar algo es inversamente proporcional a los sentimientos de admiración/desprecio que muestren. (podrá haber excepciones, claro, pero el prejuicio ya ha calado en mí :-))"


Es una crítica coherente, y como nosotros ciertamente podemos ser acusados de la más empedernida romanofilia, responderemos qué opinamos al respecto.

Creemos que tenemos derecho a nuestras pasiones fanáticas ¿No nos pueden gustar el aura de lo romano, sus innegables virtudes? ¿Hacemos mal a alguien? Maldita sociedad políticamente correcta :-)

Roma cayó, creo que todos los fanáticos lo aceptan, a regañadientes, pero se acepta :-) Por otra parte, que la Roma del fin del imperio no era la augústea, y eso también lo acepta todo el mundo, fanático o no. ¿Pero quién se atreve a decir que eran iguales la Roma del I y del V en materia de "espíritu"?

Si es que vamos a tener que aceptar que los "vulgares" Vándalos eran unos simpáticos inmigrantes en busca de papeles.

Y que un cierto sentimiento en las elites intelectuales de que lo pasado fue mejor, mostrado de forma abundante en la literatura del momento, no era una clara señal de decadencia social.

Que estos fenómenos y otros tienen motivos económicos es algo que por supuesto no negamos, los tienen. Pero también inciden los psicológicos (que a su vez los tienen económicos, etc.), en una sociedad que estaba cambiando su forma de pensar y encarar el mundo de manera radical desde hacía siglos. Al buscar motivos el "espíritu" del que hablé y las cuestiones materiales no están reñidas, pueden complementarse.

Y sea este cambio de mentalidad consecuencia de factores económicos, sociales o producto del deseo divino, lo cierto es que producía una crisis moral de valores.

Para nosotros, fanáticos como nos definimos, la Roma bajoimperial tiene su morbillo. El siglo IV es fascinante y no es considero "degenerado", excepto en el aspecto económico, de plena crisis, y sus consecuencias en la sociedad, muy críticas a la larga. Pero culturalmente es muy rico y en política realmente experimental y base de todas las ideas imperiales hasta principios del siglo XX.

Por Cl. Salix Davianus
Con la colaboración de Galaicus y Saverius


P.D.: Y un poco de ad hominem: Según tenemos entendido, esto salió de un Medievalista, y... ¿No serán sucios remordimientos de ver en qué estado quedo Europa sumida cuando sus amigos entraron? ¿No serán pensamientos de alguien que se dedica a estudiar el pasado más oscuro producido por la caída de Roma en la que se ha visto sumido el hombre desde la invención de la escritura? ¿No serán ficciones psicológicas alentadas por un deseo irreprimible de disculpar cualquier atraso en la evolución racional del hombre europeo, retraso que duró cerca de un milenio? :-P

viernes, 20 de febrero de 2004

Las Meditrinalia: El ritual del vino viejo y el vino nuevo

La Meditrinalia era un festival romano relacionado con el cultivo de las viñas y el vino en general, en el que se realizaba un ritual de protección.

Tenía lugar el 11 de Octubre. En ese día los habitantes del Latium empezaban a probar su vino nuevo (mustum) y a ofrecer libaciones a los dioses.

Al beber el vino nuevo era costumbre recitar las palabras "vetus novum vinum bibo, novo veteri morbo medeor." (Varro, de Ling. Lat. vi.21; Festus, s.v. Meditrinalia). Se traduciría como “Vino nuevo y viejo bebo, de nuevos y viejos males me curo”.

Varro afirma que el nombre de la ceremonia deriva del poder curativo del vino nuevo (de “mederi”, que significa “curar”). Pero Festus habla de una diosa prehelénica del vino llamada “Meditrina”.

Las Meditrinalia son una ceremonia de ámbito privado, para lograr una buena salud durante el año. Se bebe mosto o vino nuevo. Si alguien se lo quiere hacer a sí mismo le dará mayor naturalidad. Este mosto se mezcla con vino viejo, es decir, de la añada actual. Valdría del que se encuentra en cualquier supermercado.

En cuanto a la indumentaria, lo normal es que se realice la ceremonia con toga. Pero como no es algo que se tenga de fondo de armario, serviría cualquier otro tipo de ropa *sin nudos*, lo que incluye los zapatos.

Sí que es necesario oficiar la ceremonia con la cabeza velada -es decir, tapada- pero no al estilo árabe, sino simplemente cubierta. Un trapo blanco sobre la cabeza puede servir.

La bebida que se ingiere es, como ya se ha dicho, mosto y vino, por lo que es necesario una pátina (recipiente para líquidos). Al efecto sirve un bol de esos para los cereales; no importa el material, pero que no sea de plástico.

No hay que comer nada en esta ceremonia, pero más adelante y según veamos el resultado, podremos ofrendar otra donde haya que hacer unas Placenta (pastelitos).

Tampoco hay que sacar los Lares por lo que no habremos de modelar las figuritas para esta ceremonia. A lo sumo podemos tener una de Júpiter, pero puede ser una imagen dibujada. Tampoco hay que quemar incienso. Es una ceremonia bastante sencillita, como podéis ver.

Por Fabius Salix Lucentinus. Y Marcus Salix Saverius

martes, 17 de febrero de 2004

Shakespeare y el Amor en la Antigüedad

Empezamos nuestro artículo con un fragmento de "Julio Cesar", de Shakespeare. Se trata de uno de sus mejores monólogos. En el entierro de Cesar, todo el mundo lo abuchea y aclama a sus asesinos... Con este público, Marco Antonio toma la palabra...


William Shakespeare
Julius Caesar
Act 3, Scene 2,

Mark Antony:

Friends, Romans, countrymen, lend me your ears;
I come to bury Caesar, not to praise him;
The evil that men do lives after them,
The good is oft interréd with their bones,
So let it be with Caesar…. The noble Brutus
Hath told you Caesar was ambitious:
If it were so, it was a grievous fault,
And grievously hath Caesar answered it….
Here, under leave of Brutus and the rest,
(For Brutus is an honourable man;
So are they all; all honourable men)
Come I to speak in Caesar's funeral….
He was my friend, faithful and just to me:
But Brutus says he was ambitious;
And Brutus is an honourable man….
He hath brought many captives home to Rome,
Whose ransoms did the general coffers fill:
Did this in Caesar seem ambitious?
When that the poor have cried, Caesar hath wept:
Ambition should be made of sterner stuff:
Yet Brutus says he was ambitious;
And Brutus is an honourable man.
You all did see that on the Lupercal
I thrice presented him a kingly crown,
Which he did thrice refuse: was this ambition?
Yet Brutus says he was ambitious;
And, sure, he is an honourable man.
I speak not to disprove what Brutus spoke,
But here I am to speak what I do know.
You all did love him once, not without cause:
What cause withholds you then to mourn for him?
O judgement! thou art fled to brutish beasts,
And men have lost their reason…. Bear with me;
My heart is in the coffin there with Caesar,
And I must pause till it come back to me.


¿Tras leer esto, quién puede negar que Shakespeare se inspiró de forma genial en la Antigüedad?
Hay quien afirma que, en realidad, todas las tramas de Shakespeare existen ya en el teatro griego y romano. ¿Será realmente cierto que no hay nada nuevo bajo el sol?

Nuestra respuesta (que no es la que sería de esperar de unos latinófilos empedernido) es que Shakespeare sí contiene innovaciones con las que los romanos y griegos no contaban.

Para empezar, porque entre el uno y los otros pasó mucho tiempo y sucedieron muchas cosas :-)... Por ejemplo, la Edad Media :-D

Si, en la Edad Media hubo innovaciones ideológicas y argumentales. Por ejemplo, en torno al amor.

Antes de la Edad Media, el amor era un tópico argumental y social conocido. Los hombres ya se fijaban en las mujeres (y viceversa) y todos en general ya hacían bastantes tonterías llevados por los efluvios hormonales, como siempre ha sido de rigor.

Sin embargo, el amor como tal no era visto como una fuerza mística positiva. Era algo destructivo, una especie de locura que forzaba a la gente a ir contra del honor y la piedad, y que causaba tragedias. Los enamorados que protagonizaban las grandes tragedias eran compadecidos, o comprendidos, pero no admirados.

Fue en la cultura trovadoresca languedociana (dígase impostando la voz) donde surgió el curioso concepto de que el amor ennoblece (o es sólo accesible a las almas nobles) y hace mejores a las personas.

Lanzarote y Ginebra (y, como ellos, Tristán e Iseo) tenían una historia de amor que, como las de antaño, lo mostraba como una fuerza que destruía todas las convenciones sociales (y, de paso, a los enamorados).

Sin embargo, a los romanos no se les ocurría admirar a Dido, a Paris y Helena o a Edipo por sus amores destructivos. A cambio los caballeros y damas sí consideraban a Lanzarote y Ginebra como modelos a seguir.

Esto se nota bastante en los argumentos de Shakespeare. Por ejemplo, "Romeo y Julieta", de haber sido escrito por un romano (¿quizá cierto informador de paso por Palmira?) habría tenido como moraleja que los dos enamorados hicieron muy mal, que lo que tenían que haber hecho es seguir con las luchas entre Capuletos y Montescos como estaba mandado, y que por descontado que hacer el memo de esa manera no les hizo mejores personas que sus enconados familiares. O, si acaso este hipotético romano hubiera querido presentar a los amantes en una situación positiva, al menos habría transformado todo en una comedia de enredo con final feliz.

En la Antigüedad tenemos a Dido y Eneas, que son amantes, y amantes de verdad. Amor verdadero :-). Eneas tiene que abandonarla, pero no porque su amor esté mal, sino porque tiene que cumplir su destino: fundar la raza que engendrará a los romanos. Hay un conflicto, como en "Romeo y Julieta", y su amor es imposible. Pero es un amor destructivo, contrario a la voluntad de los Dioses. Eneas “hace lo correcto”, como buen héroe, y abandona a Dido. El amor entre los dos será la causa, no la respuesta, a mil desgracias.

Hay más ejemplos: la fidelidad de Penélope, el romance ente Eneas y Lavinia (¡un final feliz!)... Pero ningún amor que “tenga la razón” frente a las convenciones sociales o los dioses

Ese trasfondo ideológico está también en todas las obras más "ligeras" del Bardo, de las que muchas al fin y al cabo no son más que "yo me emparejo y desemparejo y vosotros también y al final se casa todo en mundo, menos el malo, por malo" (Much ado about nothing, por ejemplo). Pero en eso Shakespeare sólo seguía a Plauto.

¡Aunque que nadie piense que en la Antigüedad no se hacía caso al público más interesado en los romances! Las novelas de amor tipo Corín Tellado, "novelas griegas" para los romanos, eran muy abundantes en la época del imperio. Su mercado principal eran las hijas de la burguesía provincial y del amplio sector del funcionariado. Títulos como "Dafnis y Cloé" de Longo pasaron la criba de los siglos y alcanzaron el Renacimiento, donde fueron bien consideradas. Al igual que "Aventuras de Chaireas y Kallirroé" o "Las Efesíacas".

Eran verdaderos dramones románticos en los que una pareja de enamorados se veía separada por las circunstancias y pasaba multitud de aventuras, excesivas quizá, hasta volver a juntarse y amarse para siempre. Muchas son novelas que ocuparían hoy 300 páginas. Verdaderos culebrones de amor apasionado que no se diferencian en casi nada de lo que podemos encontrar en las librerías del supermercado.

No hay que olvidar tampoco que los romanos tenían sus novelas, como “El Satiricón” de Petronio o “El Asno de Oro” de Apuleyo donde se narra una serie de peripecias -alejadas algunas del amor- y se narran también historias amorosas siguiendo la Teoría del Abismo. Es decir, introduciendo una historia dentro de otra historia (como el cuento de Eros y Psique, muy recomendable por cierto).

Lo que importa realmente en las novelas rosa de la antigüedad no es tanto el amor, que funciona de hilo conductor, como las peripecias, los viajes, las descripciones de nuevas tierras y costumbres, que es lo que atraía al lector. Lejos de las novelas de Arlequín o de Corín Tellado.

La imposibilidad del amor viene dada por el rapto de uno de los protagonistas, generalmente el chico, pero eso va a gusto del autor. Es un género nuevo, que nace casi por la necesidad de contar los nuevos descubrimientos geográficos de un modo más divertido que las Corografías, (de las que por cierto, la del hispano Pomponio Mela es excelente).

También hay más cargas ideológicas en Shakespeare que nosotros ya no poseemos pero que para los romanos no sólo existían sino que eran ya casi obsoletas. Como por ejemplo, el respeto por la sacralidad de la monarquía de "Macbeth", historia que un griego o un romano habrían entendido muy bien (aunque se habrían sorprendido: sus fantasmas teatrales no hablaban). Obras de teatro sobre reyes era lo que sobraba en la Antigüedad, con sacralidad de la monarquía y todo (los romanos eran expertos en sacralizaciones).

Shakespeare también tuvo temáticas de la Antigüedad como simbolizar conceptos humanos por medio de sus obras. "Otelo" son los celos, "Timón de Atenas" la misantropía... Sus mejores obras están realizadas en torno a un concepto que se expone, normalmente alrededor de un personaje. Los héroes de las tragedias antiguas simbolizaban al héroe de la tragedia que acababa aceptando su destino, pero también un arquetipo dado. Héctor es la virtud, Aquiles la fuerza y el valor, Odiseo/Ulises la inteligencia y el ingenio, Eneas la disciplina y la obediencia... :-).

En fin, que si, que gente como Schopenhauer (tan alegre, optimista y luminoso el) se emocionaba mucho con que después de los griegos y romanos no se había inventado nada en el arte, pero eso sencillamente no es verdad.

Como una última curiosidad sobre Shakespeare y sus obras, decir que entre algunos de sus versos hay los yamados "yambos", esos versos de ritmo contínuo y adormecedor que tienen algún tipo de conexión con los misterios eleusinos, donde se cantaba de esa manera para entrar en un trance adormecedor... La más conocida de sus frases yámbicas, es la de "Now is the winter of our discontempt" (Richard III), con la que nos despedimos.

Now is the winter of our discontent
Made glorious summer by this sun of York;
And all the clouds that lour'd upon our house
In the deep bosom of the ocean buried.
Now are our brows bound with victorious wreaths;
Our bruised arms hung up for monuments;
Our stern alarums chang'd to merry meetings,
Our dreadful marches to delightful measures.
Grim-visag'd war hath smooth'd his wrinkled front;
And now, instead of mounting barbed steeds,
To fright the souls of fearful adversaries,
He capers nimbly in a lady's chamber,
To the lascivious pleasing of a lute.



Por M.S.Saverius

Con la colaboración de Gn.S.Astur, Sceptius y Fabius Salix Lucentinus.

lunes, 16 de febrero de 2004

De opinionibus romanorum praeclarorum (II)

He aquí las opiniones de Cicerón y Plinio sobre los ludi... He tomado el texto de Cicerón adaptado un poco para animaros a que tratéis de coger un poco la traducción, y os sea de provecho un poco de Latín en vuestras vidas.


GARBANZÓN (CICERO)

“Fuerunt venationes binae, per dies quinque, quas magnificas fuiise nemo negat; sed queae potest homini polito delectatio, cum aut homo imbecillus a valentissima bestia laniatur, aut praeclara bestia venabulo trnasverberatur. Extremus elephantorum dies fuit, in quo admiratio magna fuit vulgi atque turbae, delectatio autem nulla exsistit.”

Hubo dos cacerías, que duraron cinco días, que nadie niega que fueran magnificas; ¿pero qué placer visual puede haber en esto para un hombre de cierta cultura, el ver cómo otro hombre imbécil es descuartizado por un valiente animal o el ver que una ilustre bestia es atravesada por un venablo. El último día fue el de los elefantes, que fue la gran admiración del pueblo y la chusma, por más que no hubiera nada interesante en eso.

Este tipo se permite juzgar si había o no había algo interesante en los espectáculos ¿Acaso se creía mejor que el resto del pueblo? A buen seguro que sí ;-)


PLINIO EL JOVEN

Este otro tipo es algo menos arrogante que Garbanzón, pero parece ser que tampoco consideraba la leche a los juegos:

"Circenses erant, quo genere spectaculi ne levissime quidem teneor. Nihil novum, nihil varium, nihil quod non semel spectasse sufficiat. Quo magis miror tot milia virorum tam pueriliter indentidem cupere currentes equos, insistentes curribus homines videre. Si tamen aut velocitate aut hominum arte traherentur, esset ratio non nulla..."

Había [juegos] circenses, un tipo de espectáculo por el que no siento la menor afición. Nada nuevo, nada variado, nada que no baste con haber visto una vez. Pero lo que más me admira es todos esos miles de hombres tan infantilmente deseosos de ver otra vez de nuevo caballos corriendo y hombres montando en carros, si por lo menos o la velocidad o el arte de los hombres tuviera algo, entonces por lo menos habría alguna razón [para verlo]

Con lo cual parece que a Plinio no es que le parezca que esto no es digno de un hombre instruido como al soberbio de Cicerón. Plinio sencillamente ve algo flojillos estos juegos, jejeje

En la próxima entrega os enviaré la opinión sobre el sistema de clases electorales (centurias) que en opinión de Cicerón "garantiza que la mayor parte del poder no esté en poder de la mayoría". Desde luego algo muy propio de un optimate retrógrado. Si tengo tiempo me entretendré en buscar las opiniones filosóficas de Cicerón para demostrar la poca coherencia y superficialidad de este tipo deleznable y mostrar que su intelectualidad es solo un leve barniz que no puede ocultar a un tipo clasista y pernicioso para Roma. Que pasó a la historia como un gran héroe... ¡Ay, si en Pistoia hubieran vencido las tropas de Catilina!


Por Cl. Salix Davianus

jueves, 12 de febrero de 2004

De opinionibus romanorum praeclarorum

Hemos estado leyendo algunas cosillas sobre Roma y nos hemos centrado en buscar qué pensaban personajes importantes sobre cuestiones importantes.

Por ejemplo ahí está el optimatón de Cicerón, uno de los romanos más citados con admiración, pero que a otros nos cae como una patada en salva sea la parte.

Por ejemplo leed, leed su defensa de este optimate (derechista) que recuerda a las declaraciones del más rancio belicismo:

"Quaedam officia servare debemus etiam adversus eos, a quibus iniuriam accepimus. Est enim ulciscendi et puniendi modus. Atque in republica maxime conservare debemus iura belli: Nam cum sint dua genera decertandi, unum per disceptationem, alterum per vim, cum illud proprium sit hominis, hoc bellarum, confugere debemos ad posterius, si adhibere superiorem non possumus. Quare suspicere bella tantum debemos ob eam causam, ut sine iniuria in pace vivamus: parta autem victoria, conservare debemos eos, qui non crudeles in bello, non immanes fuerunt, ut maiores nostri multos hostes in civitatem etiam acceperunt; at Carthaginem et Numantiam funditus sustulerunt."

[Ciertas obligaciones debemos tomar contra aquellos, de los cuales hemos recibido injurias. Y en verdad es la manera de vengarnos y castigarlos. Y por eso en la republica debemos cuidar especialmente del Derecho Bélico: Pues existen dos modos de decidir las cosas, uno a través de la discusión [diplomática] y otro a través de la fuerza, porque [esto] es propio de la naturaleza humana. Aún siendo propio [también] de animales, debemos acudir a los bajos [instintos] si no podemos servirnos de [principios] superiores. Porque esta causa debemos encargarnos tanto de la guerra, para que vivamos en paz y sin injuria: Conseguida la victoria, debemos conservar a aquellos que sin ser crueles ni inhumanos, como nuestros antepasados que acogieron a los enemigos [como esclavos(?)] y que arrasaron por completo Carthago o Numancia.]

A poco que lo miréis bien no hay tantas diferencias con un discursito moderno de ya sabemos quienes.

De Cicerón hemos leído también una cosilla curiosa, de un tema casi más importante, los Ludi.

"Odiamos a los gladiadores débiles y suplicantes que, con las manos extendidas, suplican que les permitamos vivir."

¿Cómo decir de este individuo que era derechista, malévolo...? ¡Si era un beato! :-P Esperamos que se comprenda que el desprecio por un tipo mezquino e intriguero como Cicerón está justificado :D

Por

Cl. Salix Davianus y Sceptius

miércoles, 11 de febrero de 2004

Pollice Verso

Gracias al cine hoy están más de moda que nunca los munera gladiatoria.

Pero el cine también puede ser engañoso. Realmente es poco lo que sabemos de los juegos del circo romano.

Existe una expresión, "pollice verso", que parece estar relacionada con el perdón o la ejecución del gladiador vencido. Sin embargo, hace poco surgió una nueva hipótesis, según la cual, en contra de lo que casi todos creemos, el pulgar hacia arriba significa la salvación del gladiador, y el pulgar hacia abajo significa su ejecución.

¿Cuál es la verdad?

Es verdad que en el cine americano, más que preocuparse de la fidelidad histórica adaptaron su modelo de lenguaje "manual". Para ellos, el pulgar hacia arriba ya era una señal de que todo iba bien, por lo que sus espectadores entenderían el gesto a la primera.

Lo cierto es que la expresión "pollice verso" no significa precisamente el pulgar "hacia abajo", sino más bien un movimiento del dedo. Muchos defienden la teoría de que era eso, que se movía el puño con el pulgar levantado, pues era más claro de ver para el gladiador y muy parecido al gesto de degollar (gritaban ¡Iugula!), indicando que se ejecutase al vencido.

Pero en este asunto hay mucha incertidumbre y no deja de ser una teoría más.

Según la nueva teoría el pulgar hacia abajo indicaría que la espada apunta a la arena, concediendo el perdón al gladiador, y el pulgar hacia arriba vendría a ser exactamente como gesto que hoy conocemos el de pasarnos un dedo levantado por el cuello, con la señal de que se le corte el cuello. Probad a hacerlo con pulgar, tiene bastante sentido :-)

Es una teoría que empieza a ser realmente aceptada, porque incluso los grupos de reconstrucción histórica de gladiadores de los que tenemos fotos en la web, comentaron esta teoría como probable, en las jornadas de reconstrucción histórica de Tarragona.

Claro que también podría defenderse la teoría contraria: Que el pulgar hacia abajo significa rematar al enemigo caído, y el pulgar hacia arriba significa que el gladiador vencido debe levantarse del suelo. Lo del signo de degollamiento tiene sentido, pero no acaba de explicar la expresión "pollice verso".

En casi todos los textos de cultura latina y en muchos documentales y videos didácticos se enseña siempre la teoría tradicional: Para condenar a muerte al gladiador vencido se "daba la vuelta" al pulgar, se le cambiaba de su posición normal. Eso es lo que significa el verbo "vertere"

En efecto, "pollice verso" sólo puede querer decir "pulgar cambiado". La idea de pasearlo por el gaznate parece razonable, si no fuese porque no puede explicar el término "pollice verso".

A falta de datos concluyentes, cada uno es libre de opinar como guste :-).

Por

Gnaeus Salix Astur, T. Minicius Marianus , L.F.V.Pompaelianus y Galaicus

miércoles, 4 de febrero de 2004

El Vocalismo del Latín tardío

Hemos ido mencionando temas colaterales en los artículos, y tarde o temprano tenía que caer uno sobre el sistema vocálico del latín tardío.

Como sabréis el latín clásico tenía un sistema de 10 vocales /a, a:, e, e:, i, i:, o, o:, u, u:/ . El rasgo de longitud [:] era relevante pero no así el de obertura: Es decir, una vocal podía ser más o menos abierta según el contexto o su longitud pero los hablantes no eran conscientes de eso y no era relevante para ellos.

La historia cronológica de como cambió el latín sería más o menos esta (¡ojo, que esto es sólo mi versión!)

(1) Parece ser que, por los hábitos de pronunciación, el acento latino se fue volviendo más enérgico en la sílaba acentuada tendiendo a alargar la sílaba tónica.

(2) Este énfasis articulatorio hacía que la vocal tónica fuera más clara y las otras se hicieran menos audibles. Concretamente en las otras sílabas el contraste era más difícil de notar. Esto arruinaría el sistema de oposición de longitud, ya que de hecho parece que el acento tendía a alargar a veces la sílaba tónica. Numerosas lenguas como el inglés, catalán o el vietnamita tienen un número mayor de contrastes vocálicos en sílaba tónica que en sílaba átona, con lo cual esto es completamente natural.

Este proceso se había iniciado ya en s. III. La primera referencia que he encontrado (tal vez haya alguna anterior) se debe al gramático Marius Plotius Sacerdos (s. III); habla de la abreviación de las vocales largas a final de sílaba calificándolo de "barbarismus nostri temporis". Él, por tanto, debió empezar en las sílabas átonas en consonancia con lo que sucede en el inglés, el catalán y el vietnamita.

(3) El siguiente paso fue algo fortuito. Por su propia articulación las vocales largas serían un poquitín más cerradas (con la lengua situada más arriba), y al desaparecer la distinción larga breve esto se hizo más exagerado. Fonéticamente podríamos suponer que el sistema pasó fonéticamente a ser algo como [i:, î, e:, ê, a:, â, ô, o:, û, u:] (^ vocal más abierta, : vocal más larga)

Esto provocó cierta confusión en los timbres vocálicos. Sólo el dialecto de Cerdeña, que más tarde se convertiría en el Sardo, conserva el sistema de timbres intactos:

/i, i:/ pasó a ser /i/
/e, e:/ pasó a ser /e/
/a, a:/ pasó a ser /a/
/o, o:/ pasó a ser /o/
/u, u:/ pasó a ser /u/

Pero en el resto de idiomas empezaron a darse confusiones hacia el s. IV. De esta aseveración no tengo referencias, sólo me guío por el sistema del rumano, que es diferente del del resto de lenguas, y por la fecha alrededor de la cual el proto-rumano quedó más aislado del resto del imperio.

A partir de entonces empieza a ser muy frecuente la confusión en los textos de /i/ y /e:/ en /e/ mientras que la /e/ breve pasaría a /ê/ e /i:/ larga quedaría como /i/.

Algo más tarde (tal vez en el s.V) también se confunden /u, o:/ que pasarían a ser /o/. En rumano lo que pasa es que /u, u:/ pasaron a ser /u/ y /o, o:/ se convirtieron en /o/. Pero en el resto del imperio (excepto Cerdeña y probablemente los balcanes) sucedieron estos cambios:

/i:/ pasó a ser /i/
/i, e:/ pasó a ser /e/
/e/ pasó a ser /ê/
/a, a:/ pasó a ser /a/
/o/ pasó a ser /ô/
/u, o:/ pasó a ser /o/
/u/ pasó a ser /u/

Este es ya el sistema que encontramos en Italiano o en Catalán.

(5) Otras lenguas sufrieron además cambios posteriores. El francés /e/ pasó a ser oi... Pero mejor no discuto el francés, que es de los casos más terroríficos.

En castellano suceden cosas más previsibles:
/ê/ tónica pasó a ser /ye/ = [ie]
/ô/ tónica pasó a ser /we/ = [ue].
Y el resto de pares abiertas/largas en sílaba átona se confunden.

Algunas lenguas periféricas como el gallego portugués conservarían diptongos, por ejemplo lat. /au/ pasó a ser /ô/ en la mayoría de lenguas, pero el gallego-portugués exhibe el arcaísmo [ou]: lat. /aurum/ que pasó a ser gall. /ouro/.

Por

Claudius Salix Davianus

Vulcanalia: El festival del fuego y los volcanes

El 23 de Agosto se celebra la Volcanalia o Vulcanalia: Un ritual en honor del dios Vulcano, dios del fuego, gobernante de los volcanes y patrón de las forjas.

A pesar del calor que suele hacer en Roma en verano, muchos ciudadanos se reunían en el Foro o en sus casas para celebrar este ritual. Con él se protegían de los incendios, de los volcanes y los terremotos honrando a Vulcano. Como el ritual exige encender fuegos, el templo de Vulcano lo pusieron en el Campo de Marte, fuera de la ciudad (al parecer aprendieron esta lección por las malas)

Para los que queráis honrar a Vulcano y protegeros de incendios, volcanes y terremotos el ritual sería así:

"El ritual consiste en asar un pescado y ofrecérselo a Vulcano.

Como siempre en Roma, el ritual debería realizarlo si es posible el padre de familia, que es el sacerdote del hogar.

El tipo de pescado es indiferente. Tal vez usasen más el de río por la proximidad al Tíber de los escogidos que viviesen en la capital. Pero los que vivieran cerca del mar usarían pescado marino.

La tradición dice que el pez debe estar vivo cuando se arroje al fuego. Pero para contrarios a los sacrificios cruentos, el pescado puede estar muerto.

Lo que sí debéis hacer es asarlo, dejar que la grasa y la piel se consuman bien y no comer estas partes, pues son las que se ofrendan al dios.

Si queréis comeros el resto, no hay problema.“

¡Ya sabéis, de vosotros depende que no se os pegue fuego a las casas o que no entre en erupción otro volcán o que no hay un terremoto!

Lamentándolo mucho, y como casi siempre, no nos ha llegado la forma exacta del ritual ni la oración que hay que pronunciar durante el mismo. Sólo tenemos lo que se hacía.

Al hablar de rituales romanos es importante explicar conceptos como "impiedad", “expiación”, "vicio en el ritual", etc.

¿Recordáis la peste de Tebas en “Edipo”? Bien, él no hizo mal ningún rito, pero estaba viviendo en impiedad. Digamos que era impío de la mañana a la noche y un día tras otro, por lo que los dioses lo castigaron con la peste sobre su ciudad. Estas cosas se solucionaban condenando al impío a lo que dictaminasen los oráculos y purificando luego la ciudad, que había quedado impregnada de sacrilegios.

Otro ejemplo sería el emparedamiento de las vestales que rompían el voto de castidad. Era una expiación para salvar la ciudad, que sufriría por la impiedad de una sola mujer.
A ella se la enterraba viva para no romper el tabú de hacerle violencia a una vestal y a él lo mataban directamente.

¡Ojo! No se trata de una expiación por los pecados porque, de entrada, en el paganismo pues no hay concepto de pecado. Por ejemplo, la cólera de los dioses discrimina poco entre inocentes y culpables.

Los ritos eran válidos y los dioses escuchan siempre, pero sólo si se hacen de forma correcta. Si un rito se realiza de forma incorrecta (tiene un “vicio”), puedes esperar que los dioses no te escuchen. Y si es un vicio muy ofensivo, quizá las cosas se te vuelvan adversas, pero sólo por lo relacionado con ese rito. ¡En Pompeya probablemente realizaran mal la Vulcanalia!

No creo que cometamos impiedad por no cumplir bien los ritos en nuestra época, pues seguramente los dioses son conscientes de la evolución social e histórica y de la imposibilidad de muchos rituales a fecha actual. Hay que adaptarse a las nuevas exigencias, pero respetando. Si se hace con voluntad y con creencia y convencimiento, ningún rito puede salir mal tras más de mil quinientos años de abandono y con lagunas que imposibilitan la exacta reconstrucción. No podremos saber qué se decía en esta oración pues no tenemos ningún registro. No somos nosotros los culpables

Un último apunte: A alguno le parecerá que la Vulcanalia se parece sospechosamente a un picnic familiar multitudinario en verano, en el campo de Marte con pescaíto asao.

Bueno, los romanos se tomaban muy en serio hacer bien estos ritos sin risas ni coñas. La salud propia y la de la ciudad dependía de ello. Pero también fuerion siempre un pueblo eminentemente práctico :-D

Por Fabius Salix Lucentinus. Y Marcus Salix Saverius