El malhumorado Suetonius nos informa de que el emperador Calígula era un excéntrico: Era aficionado a aparecer en público cubierto de brocados, piedra preciosas y túnicas de manga larga. Y a veces se le veía vestirse con sedas orientales o de mujer... Evidentemente esas sedas sólo podían proceder de China.
Las fuentes clásicas no presentan demasiadas referencias a los Chinos. Así que para averiguar algo más sobre las relaciones entre Roma y China me puse a buscar en las fuentes Chinas. Los chinos han tenido desde siempre un rigor histórico mayor (piénsese en las fantasías que leemos en Aristeas, Herodoto, Hecateo o Ctesias!) y se han esmerado más en consignar por escrito todas las informaciones que consideraban importantes. Así que no es extraño que entre ellos sí encontremos algunas referencias bastante interesantes a los Romanos y a los Persas. He aquí la historia:
[En un intento de superar el caos en la trascripción de nombres chinos he usado el sistema de romanización oficial pinyin. Dado que otros sistemas de trascripción como el de Wade-Giles también se usan extensivamente añadiré la trascripción de los nombres en este último sistema entre paréntesis. Por ejemplo: Mao Zedong (= Mao Tse-tung)]
El viaje de Zhang Qian
En un intento de librarse definitivamente de sus enemigos del norte el emperador Wudi (Wuti) 140-87 a.C. buscó alianzas entre los pueblos de Asia central, concretamente entre los no demasiado conocidos Yüejin (Yüe-chih, Yü-che), que estaban en guerra contra sus enemigos ancestrales: los Xiong-nu.
Wudi buscó voluntarios para ponerse en contacto con los Yüejin y acabó encomendando esta tarea al aventurero oficial de caballería Zhang Qian (Chang-Kien).
Zhang Qian partió en su viaje en el 138 a.C. con una caravana de cien hombres, pero los Xiong-nu les interceptaron. Zhang Qian permaneció cautivo entre ellos durante 10 años. Lamentablemente para él, cuando logró escapar y llegar hasta los Yüejin éstos ya no estaban interesados en seguir con la guerra. Zhang Qian pasó un cierto tiempo entre ellos intentando reunir tanta información como fuera posible sobre ellos y otras tribus de Asia Central.
Es así como conoció los reinos de Asia Central de: Jokand, Yuejin, Daxia (Ta-Hsia, Ta-hia), Gangiu (Kang-Kiu) y otros cinco o seis estados importantes. Por ejemplo supo del país de Nangsi (Nang-Si, que se identifica con PERSIA). También supo que algunos millares de li (*) al oeste se hallaban los Diaozhe (Tiao-che, Tiao-se, que quizá identifique a Asia Minor (?)). También nos habla del mar occidental y de otro reino más importante llamado Li Rian o Liejien.
Zhang Qian no da más detalles pero muchos orientalistas concluyen que este reino del que los chinos no habían oído hablar antes es ni más ni menos que ROMA.
Nuestro infortunado mensajero fue interceptado de nuevo por los Xiong-nu en el viaje de regreso y tras lograr huir de nuevo llegó a su capital, Chang’an (la actual Pekín), después de 13 años. La información que trajo consigo (militar, política, económica y geográfica) causó sensación en la corte Han. Entre otros motivos porque gracias a su hábil emisario se habían encontrado nuevas rutas comerciales que explotar.
Una embajada discutida
Wudi envió una embajada oficial a Mitrídates II en 110 a.C., que es la fecha que se utiliza comúnmente para marcar el comienzo de la Ruta de la Seda (Hay divergencias en cuanto a esta fecha). Aunque esa ruta ya debía existir desde bastante tiempo antes, al menos desde China hasta Persia.
Ana Ramos y Carmen García ("La expansión china", en Cuadernos de Historia 16, Madrid. 1985) dicen que tal embajada fue enviada en el 115 ó 105 d.C. Al parecer la primera embajada china fue respondida con una nueva embajada persa (y tal vez una contraembajada china) lo cual haría confusas las fechas.
J. Gernet (Le Monde Chinois, Librairie Armand Colin, París. 1987) se limita a dar la fecha del 105 d.C. Que sepamos el principal texto chino que habla en cierta profundidad del tema es el (posteriores-Han-Historia o Historia de los Han posteriores).
Otras fuentes divergentes son Miguel Angel Elvira (Los Romanos en el Lejano oriente, Cuadernos de Historia 16) y Adolfo J. Domínguez Monedero (Viajes por el Atlántico y el Indico Occidental en la Antigüedad, Cuadernos de Historia 16).
En cuanto a que la embajada fuera recibida por Mitridates II, hay dudas. En parthia-L@yahoogroups.com alguien escribió que un texto chino contine el siguiente fragmento:
"In the thirteenth year (101 AD), the king of Anxi (Parthia) named Man Qu [Pacorus II? circa 79-105 AD] again offered lions, and some of the large birds of Tiaozhi (Characene and Susiana), which people call `Anxi birds' [ostriches]."
Y se pregunta a qué soberano podría corresponder la trascripción china . Como muchos conoceréis, la lectura moderna de los caracteres del Antiguo chino difiere bastante de como estos debieron ser pronunciados.
John Hill, de Parthia-L, sugiere que este nombre puede ser fonéticamente reconstruido como <*Man-k(h)ut> en chino antiguo pero deja la cuestión ahí. Y es Tom Mallon-McCorgray, también de Parthia-L, quien sugiere que esa pronunciación podría corresponderse con , rey persa tributario de los reyes partos (a esto añadió , con lo cual los demás nos quedamos sin saber más sobre el tema. Una lástima).
Aunque el caso es que los primeros contactos no se hicieron después de Cristo, sino dos siglos antes, en el 110 a.c., que parece ser el primer contacto chino con occidente y fecha oficiosa del inicio de la Ruta de la Seda. Aunque el contacto no fuese más que casual y sin continuación, sirvió de precedente, fuente de historias y estímulo para los de dos siglos después. Bueno, esto no lo decimos nosotros, lo dicen nuestras fuentes ;-).
Contactos posteriores
Pero no fueron los primeros habitantes del imperio romano en llegar a China. En 120 d.c. el gobernador de Shan (SO de China) envío a la corte unos artistas que hacían juegos malabares y trucos de magia. Éstos dijeron de sí mismos que venían del mar occidental, de Da Qin.
Tan exóticos personajes tuvieron mucho éxito. El año siguiente actuaron en la corte, en presencia del emperador An Di. Si era cierto lo que decían, fueron los primeros habitantes del imperio romano que vieron la capital de China y al Hijo del Cielo en su palacio.
Wudi y sus sucesores se esforzaron por mantener sus posesiones occidentales e incluso afianzarlas: Mingdi (58-75 d.C) conquistó el valle de Tarim y su legendario general Pan Zhao (P’an Chao) llevó a cabo una campaña entre el 73 y el 94 d.C. con la cual se puede considerar definitivamente establecida la ruta de la seda. Aunque obviamente tras las aventuras de Zhang Qian ya se había iniciado el comercio que llevaría a Calígula sus sedas con las que se vestía de mujer china ;-)
En el 115-105 a.C, China envió una importante embajada a Nangsi (Parthia), fecha a partir de la cual se datan las primeras relaciones entre China y Persia. Los Partos respondieron con una nueva embajada con la que cuentan las crónicas que enviaron huevos de avestruz y un grupo de prestidigitadores de “Lijien” (romanos en China???).
Un embajador engañado como un chino
Posteriormente Pan Zhao encargó a uno de sus lugartenientes la tarea de establecer relaciones con los Partos y más tarde con los Romanos. ¡Aunque una vez éste hubo llegado a territorio Parto, éstos le disuadieron de atravesar dichas fronteras, temiendo una alianza entre Chinos y Romanos!
El lugarteniente de Pan Zhao se llamaba Gan Ying y llegó hasta el Golfo Pérsico, donde le dijeron que "el mar es enormemente extenso, y para efectuar el viaje de ida y vuelta (a los puertos egipcios del Mar Rojo) se necesitan tres meses con viento favorable, y si el viento es flojo, incluso dos años”. En realidad dos meses como mucho.
También le dijeron que “Por eso los que seguían ese rumbo toman provisiones para tres años. Además, a lo largo de la travesía se siente una nostalgia cada vez más violenta, y no es raro que sobrevenga la muerte a causa de ella."
Ante tal panorama, Gan Ying se dio la vuelta y pasó de buscar a los famosos Da Qin. ¡Menudo embuste le contaron los partos para quitárselo de encima! :-)
Conocimientos mutuos
En el mismo año en que Chinos y Partos establecían relaciones comerciales directas, la nueva potencia Kushana enviaba una embajada a Roma con el fin de situar una vía marítima directa a través del Mar Rojo hasta la India.
Por esta época las relaciones entre Imperios lejanos ya estaban firmemente establecidas. Las excavaciones arqueológicas han mostrado restos de asentamientos romanos permanentes en las costas de la India. Por su parte los Han conocían bastante más de los Romanos que los Romanos de los Chinos. Los Han llamaban a Roma Da Qin (Gran País Occidental, aunque es traducido erróneamente como Gran China). Incluso se citan los nombres algunas ciudades romanas orientales: Hian Du (Hien Tu < *antukia < Antiochia), Ngan Du (Alejandría)...
Por su parte el nombre China proviene de la región más occidental de China: Qin (Ch’in). Los chinos se autodenominaban Zhongguo (Reino del Centro; para variar consideraban que ellos ocupaban el centro del mundo).
Embajadas impostoras
Finalmente un interesante episodio que citan las fuentes chinas (Heu Han Shu, h. 430 d.C.) y las fuentes romanas que han sobrevivido no nos dicen es que en el año 166 d.C. el emperador Marcus Aurelius Antoninus envió un embajador por vía marítima a través de Vietnam. En la fuente china se llama al emperador Andoun (Antoun < *Antoninus).
Muchos defienden que en realidad debieron ser unos comerciantes griegos avispados que se hicieron pasar por embajadores. Los mismos chinos tuvieron muchas sospechas sobre su misión: "La lista de regalos no traía piedras preciosas." Además, su equipaje estaba lleno de mercancías indias para vender.
Estos "embajadores" les hablaron maravillas de Roma. Les dijeron que poseía todas las mercancías del mundo, tenía diez palacios como ciudades y estaba llena por doquier de "columnas de cristal". A saber que otras burradas les contaron.
¿Legionarios en China?
Un historiador australiano defiende la teoría de que una cohorte del ejército de Crassus que peleó en Charrae (53 a.c.), cortada su retirada tras la derrota, sería el grupo de occidentales mercenarios que se encontró la caballería china en el 37 a.c. por Asia Central.
Las crónicas chinas dicen que eran veteranos que luchaban de forma muy disciplinada, usando una extraña formación de "escamas de pez" (¿la "testudo" o tortuga?). Los contrataron para defender un sector de la Gran Muralla. ¡Menuda historia, legionarios romanos defendiendo la Gran Muralla ;-)!
Ana Ramos y Carmen García mencionan este episodio muy fugazmente. En esta página afirman que éstos soldados fueron exterminados por los tibetanos.
“Lijien- Lijien (referring to Alexandria, the center of trade between Rome and the East) was the name used for the Roman Empire by Imperial China. It was also the name of a small town in Chinese Turkestan along its northern border. Around 40 BCE, Chinese troops attacked the capital of the Hun chieftain Jsh-Jsh, who had carved out a small chiefdom in the region between China's west frontier and the eastern borders of Parthia. They encountered and took prisoner a small band of Roman legionaries. They had been taken prisoner by Parthia during the campaigns of Crassus in 54 BCE, and sent to guard the border town of Margiana. The prisoners had abandoned their post to fight as mercenaries for Jsh-Jsh.
The Romans, anxious to avoid return to Parthia or abandonment on the steppes, readily agreed to form a military colony to guard China's border. Lijien's small Roman population gradually lost its distinctiveness, and the town itself was destroyed when the Tibetans overran Turkestan in 746."
Por Claudius Salix Davianus y Gnaeus Salix Galaicus
1 comentario:
Échale un vistaz a esta web sobre esos legionarios romanos perdidos en China. Es para caerse de culo:
http://www.nueva-acropolis.es/gandia/pagina.asp?art=3463
Publicar un comentario